“Es la mujer que galopa con alegría, amazona que llenas de color tu montura. Y bajo el ala de tu sombrero se esconde tu bella mirada”
La tradición y la historia de esta hermosa disciplina se remonta a la antigüedad. Podemos imaginarnos la típica película de época donde las mujeres salían a montar sus caballos, ahí ya se plasmaba este tipo de monta femenina, donde la elegancia y las convicciones del pasado se reflejaban en este tipo de práctica. Surge así la monta a la amazona.
Practicado en la antigüedad por las mujeres, cuando estaba mal visto que montaran a horcajadas como los hombres ya que ese consideraba algo perjudicial para la fertilidad femenina, y además no era compatible con sus vestiduras.
En la Edad Media la monta a la amazona estaba considerada como una equitación “pasiva”, llamada así porque la mujer apenas ejercía acción sobre la montura y era el hombre quien la guiaba. Con el Paso de los años, la disciplina fue tomando un papel más activo y artístico. Este tipo de “monta” sobretodo era practicado por las clases altas o la realeza. Actualmente el rol ha cambiado y esta disciplina lejos de lo que fue en la antigüedad se ha hecho su hueco para darle un toque histórico y tradicional en el mundo ecuestre. Actualmente, podemos ver amazonas en la feria de abril ó Jerez y en diversas ferias, y también en concursos de distintas disciplinas donde dejan constancia de la bonita tradición que nos han dejado.
La vestimenta de la amazona también tiene que ver con la tradición y la costumbre de la antigüedad. Las mujeres tenían que montar con una falda que les pudiera permitir montar cómodamente. La burguesía británica popularizo este estilo. Aunque en España podemos definir dos estilos de la monta a la amazona que son: el goyesco y a la vaquera.
En la monta a la amazona, la mujer monta con las dos piernas hacia el mismo lado (lomo del caballo) sujetando la fusta detrás de la cincha por el lado derecho, es por esta razón, por la cual las monturas de las amazonas son diferentes a cualquier silla normal.
La silla de montar a la amazona se fue perfeccionando con el paso del tiempo, buscando la comodidad y pudiendo así hacer monturas para poder cazar y hacer otras disciplinas, todo ello uniéndolo al elegante estilo amazona.
En el siglo XIII aparece el primer tipo de silla femenina, se llamaba “jamulga” y estas sillas hacían algo dificultoso el poder montar y iban guiadas por hombres. La silla fue evolucionando con los años y necesidades de nuestras amazonas. Este tipo de monturas fueron ganando seguridad con el paso de los años
La Emperatriz Elisabeth de Austria, Sissi, fue una de las causantes de que las mujeres pudieran montar a amazona, ya que fomentó este tipo de monta por su pasión por la equitación.
A principios del siglo XIX, se empezaron a ver sillas de estilo Victoriano, unas sillas más parecidas a las de la actualidad. Unas sillas más cómodas y ligeras para poder practicar la equitación. Actualmente se fabrican sillas seguras y de gran comodidad para nuestras amazonas
Personalmente, este tipo de monta me parece precioso, y para mí merece admiración ante todas las mujeres que la practican, destacando en disciplinas como doma vaquera o equitación de trabajo. Su evolución ha sido muy positiva para llegar a crear una tradición que convive en el mundo ecuestre. Si deseas saber más puedes visitar https://www.monta-amazona.com donde puedes enterarte de cursos, novedades y noticias.
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